miércoles, 23 de septiembre de 2015

De vídeo a blog y tiro porque me toca

¡Hola hola! Muy buenas querido visitante. Si has llegado hasta aquí posiblemente sea porque ya conoces mi canal de youtube. O porque me sigues en twitter y has visto mi spam. O yo qué sé, que te lo has encontrado de casualidad y has pensado, a ver qué es la tontería esta. Pues de momento aquí un adelanto, mira, mira las tonterías que digo.



Sea como fuere, el caso es que has llegado y ya estás leyendo esto. Y te estarás preguntando, ¿y este blog para qué es? ¿No dice que ya tiene un canal de youtube? Y si me conoces añadirás ¿No se queja siempre de que no tiene tiempo para nada? Pues sí, me quejo y no lo tengo, pero de vez en cuando saco un resquicio que me permite escribir un poquitín o grabar algún vídeo, que por cierto, ya va siendo hora de publicar otro, ¿verdad?

El caso es que los mellizos dan cada vez más guerra, y cuando llega la noche, que es cuando suelo grabar, empiezo viendo alguna serie y cuando me quiero dar cuenta me he quedado frito en el sofá, y claro, ya no hay ganas de grabar. Además que cada vez hay más series que ver, y estamos empezando nueva temporada seriéfila, ¡no me da tiempo a hablar de tantas series en el canal! 

Con lo que he pensado que estaría bien abrir este nuevo blog y recomendar alguna serie antes de que se haga viejuna y no tenga sentido hablar de ella en los vídeos. Además que esto es "Papá seriéfilo", que no sólo hablo de series, también de las tropelías de mis pequeñuelos. Y de eso también os encontraréis cosas por aquí. 

No consejos, que eso no sirve para nada. Cada niño es distinto y cada familia y el entorno también, y todo eso afecta. ¿Que mis niños se quedan roques en las hamacas? Genial, esa suerte que tengo, el de mi hermana se queda frito en el columpio y sin embargo los míos no quieren ni verlo. Y así muchas cosas. Así que lo único que contaré aquí serán anécdotas de mis chicuelillos y cómo van evolucionando para convertirse poco a poco en unos seriéfilos de pro.

Así que como diría Mick, ¿quieres... venir conmigo?